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D. R. © 2019, Armando Zúñiga

 

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Se editó para publicación digital en septiembre de 2019

 

ISBN 978-607-8676-20-0

 

Hecho en México





En primer lugar, quisiera dar gracias a Dios por haberme permitido realizar la publicación de este libro como una forma de agradecimiento a mis seres queridos por la clase de vida que hasta ahora he recibido de su parte; por el trabajo, la dedicación y la constancia que día con día todos tenemos, por el respeto que manifiesto hacia ellos, porque hasta este momento he sido un buen ciudadano, al no tener vicios y ser muy trabajador y responsable, pues eso lo aprendí de ellos.

Expreso de forma breve lo que acontece en nuestro mundo actual y espero que estas frases y pensamientos cumplan su función: provocar la reflexión. Mi más sincero agradecimiento a todos mis seres queridos.



Vicios y adicciones





A través de los años los vicios se han encargado de destruir cosas que son muy importantes para nosotros: la familia, la pareja, los hijos, empleos, negocios, etc.

Desafortunadamente los vicios nacen del resentimiento, y sin darnos cuenta somos vulnerables ante la vida y los adquirimos para complacer a los demás, sin imaginar que estos nos llevarán a la perdición y nos convertimos en sus esclavos, siendo muy difícil dejar de serlo cualquiera que sea el vicio: tabaco, alcohol, drogas, juego, etcétera.

¿Cuántos bienes materiales tendríamos si no tuviéramos vicios? Porque los vicios no se satisfacen si no se mantienen.

»Los vicios son enfermedades voluntarias.



Triunfo y fracaso





En la vida podemos fracasar o triunfar, triunfar o fracasar no es malo. Ante la sociedad y ante uno mismo el fracaso no es aceptable, el fracaso nos produce una sensación desagradable. Podemos construir o destruir, destruir es fácil y rápido; por el contrario, construir es difícil y tardado. De nosotros depende triunfar o fracasar porque tenemos la voluntad para hacerlo y nadie nos lo impedirá. Si triunfamos adquirimos cosas, y si fracasamos, las perdemos.

Si realmente queremos lograr metas positivas en la vida debemos esforzarnos día con día y ver los obstáculos no como impedimentos sino como retos.

»De lo único que realmente somos dueños
es de nuestra voluntad.



La paz interior





¿Por qué nos sentimos prisioneros? Si estamos en libertad, ¿por qué no nos sentimos libres? Si estamos prisioneros en realidad, hay alguien que así nos hace sentir, hay una mujer que siempre nos acompaña a todos lados. Esa mujer no se deja engañar y mucho menos sobornar; si estamos bien nos premia, si estamos mal nos castiga, y esa mujer es nuestra conciencia. Es muy cómodo vivir bien, pero es muy difícil hacer las cosas bien. La paz interior es lo mejor que podemos tener y es muy valiosa porque no está en venta, la responsabilidad nos exige hacer las cosas bien.

»El ser humano será libre
si su conciencia le permite serlo.



Buena o mala voluntad





Beneficiar o perjudicar a los demás no está prohibido. Lo mejor es beneficiar a los demás, sin embargo, muchas veces los perjudicamos a consecuencia de la amargura personal que tenemos y somos implacables con ellos aunque no esté bien hecho. Por el contrario, cuando tenemos buena voluntad, los demás se benefician por nuestro buen proceder. Ya sea que beneficiemos o perjudiquemos a los demás, lo hacemos con palabras o acciones.

Con nuestras buenas acciones podemos alcanzar la verdadera libertad, pero no es fácil hacer las cosas bien.

»Lo que en el corazón se tiene en palabras,
en acciones se convierte.



El hombre valiente





Qué bonito es cuando alguien cumple lo que promete. Si alguien ofrece algo y lo da, esto habla bien de él y todos nos sentimos satisfechos, sin embargo, cuando las personas no cumplen lo que prometen, por el contrario, traicionan y se aprovechan de la buena voluntad haciendo gala de su habilidad para mentir.

En realidad resulta muy complicado cumplir lo que uno promete, pero si siempre lo hacemos así, resultará muy fácil por la costumbre que tendremos de actuar así.

»La mejor prueba para demostrar que un varón
es un hombre es que respete su palabra.



Es su decisión





En la vida siempre hay cosas buenas y cosas malas, depende de nosotros cómo enfrentamos la prosperidad o la adversidad. Si no aprovechamos las etapas de la prosperidad, difícilmente podremos superar las etapas de la adversidad; si permitimos que nos supere, no podremos hacer nada, sin embargo, si enfrentamos la adversidad con valentía, esta no podrá con nosotros.

Cuando tenemos rachas positivas o negativas hay que tener mucho cuidado, porque no es saludable; no saber controlarlas podría ser muy perjudicial. Cuando las rachas son positivas, nos puede superar la comodidad, y cuando son negativas, nos puede superar el pesimismo.

»Lo que realmente te puede vencer es tu pesimismo.



Amor y esperanza





Podría decirse que el amor es la más sublime expresión de respeto hacia los demás; además de un sentimiento, podría considerarse una esperanza. Cuando tenemos una desilusión, cuando enfrentamos grandes adversidades, el amor está ahí y nos da fuerzas para seguir luchando día con día.

No cabe duda que el amor es hermoso cuando es sincero, es una fuerza desconocida que nos motiva a superar cosas que parecen muy complicadas.

»El amor es un amanecer
que inicia cuando el sol se oculta.



Justicia viva





La vida está llena de injusticias, aunque no siempre ha sido así. Es la ley de la vida: todo lo que sube tiende a bajar; aunque creamos que las injusticias serán eternas, no es así, hay más luz que oscuridad.

No importa que nos traicionen demasiado, porque al final todos cosechamos lo que sembramos y nadie puede renunciar a su destino.

»El poder de la corrupción
nunca podrá contra la fuerza de la justicia.



Un gran castigo





En la actualidad los vicios dominan gran parte del mundo, y es muy difícil vencerlos; es triste ver cómo nos volvemos esclavos de nuestra voluntad, lo intentamos pero es inútil sin saber que la clave está en el principio, aunque sea muy difícil negarse a ellos al inicio.

Al decidir aceptar algún vicio no nos damos cuenta de que perdemos algo muy valioso, que a pesar de serlo es algo que no tiene precio, y que es muy importante conservar: nuestra salud.

¿Qué será más difícil? ¿Dejar un vicio o evitar agarrarlo?



El hubiera no arregla nada





Como nos arrepentimos después de la primera impresión, después de haber dejado ir la primera oportunidad, posteriormente queremos arreglar las cosas, pero es demasiado tarde; la frustración nos invade y nos impide ser plenamente felices. A pesar de que el futuro es un misterio, no hay que tener miedo y hay que enfrentarlo con valentía.

Cuando permitimos que el orgullo o el resentimiento nos dominen, tomamos decisiones equivocadas y, después de haber rechazado las opciones que pudieron cambiar nuestras vidas, nos damos cuenta de que es demasiado tarde.

»Nadie sabe lo que adquiere hasta que lo acepta,
pero si no lo acepta, no lo adquiere.



La fe





Cuando las cosas no resultan como uno lo espera, nos sentimos decepcionados y poco a poco vamos perdiéndole sentido a la vida, sin darnos cuenta de que la solución está en nosotros y que no hay nada lo suficientemente difícil para vencernos: todo será más fácil si conservamos la fe.

Si mantenemos la fe dentro de nosotros, podremos lograr todo, lo difícil se nos hará fácil, y tal vez lo que consideramos imposible podamos hacerlo posible si no perdemos la fe.

»La fe de un hombre es como la batería en un coche.



No es tan difícil






»Ante la adversidad solo tienes dos opciones:
La controlas o dejas que te controle.